Al igual que con Rafael Correa en Ecuador, la proscripción de Evo es el intento desesperado de los grupos dominantes de la derecha neoliberal, por impedir que el pueblo vuelva a recuperar la posibilidad de gobernar, para el bien de las mayorías populares y en defensa de sus recursos naturales.
Evo ha dicho: "Podrán proscribirme a mí, pero no van a proscribir al pueblo boliviano". Esta definición, que habla de la grandeza de quien pone por delante de una candidatura el interés del movimiento popular, ratifica la voluntad de enfrentar las maniobras proscriptivas yendo a las urnas para que los trabajadores, los indios, los campesinos, los pequeños productores, sean los que con su voto, recuperen un gobierno que no esté sometido a los intereses de los círculos del poder oligárquico.
Los trabajadores y los sectores populares que queremos volver a tener una América Latina unida y solidaria, expresamos nuestro apoyo a esta decisión que enaltece aún más la figura de Evo Morales.
Hugo Yasky
Secretario General
Carlos Girotti
Secretario de Comunicación