El Ministro de Economía de la Nación y candidato a Presidente por ‘Unión por la Patria’ Sergio Massa anunció que, a través de un decreto, el piso de Ganancias subirá hasta $1.770.000 a partir del 1 de octubre, lo que eximirá del pago a unos 800.000 contribuyentes y dejará al margen de la carga al 90 por ciento de quienes actualmente lo tributan. También detalló que enviará al Congreso un proyecto de ley para que solo paguen ese tributo los mayores ingresos superiores a quince Salarios Mínimos, Vitales y Móviles con puestos jerárquicos.
Massa hizo el anuncio en Plaza de Mayo, tras haber mantenido una reunión con dirigentes de la Central de Trabajadores y Trabajadoras de la Argentina (CTA-T), de la CTA Autónoma (CTA-A) y de la Confederación General del Trabajo (CGT). Allí estuvieron presentes la ministra de Trabajo, Raquel ‘Kelly’ Olmos, autoridades de la Cámara de Diputados y lxs representantes sindicales Hugo Yasky, Roberto Baradel, Vanesa Siley, Abel Furlán, Omar Plaini, Héctor Daer, Pablo Moyano, Carlos Acuña, Sergio Palazzo, Guillermo Moser, Hugo Godoy, entre otrxs.
Afuera, en la Plaza de Mayo, los ánimos estaban expectantes de los anuncios. Luego de que se hiciera presente para saludar a la multitud y pronunciara las novedades con un hilo de voz, debido a una disfonía, comenzaron los cánticos: "Se siente, se siente, Massa Presidente".
“En 2019 empezamos a recorrer un camino de disminución y llegamos a este momento en el que menos de 800.000 trabajadores argentinos están pagando impuesto a las ganancias”, detalló Sergio Massa y agregó: “Para mí el salario no es ganancia, el salario es remuneración. Es el pago por el trabajo y el esfuerzo que hace cada trabajador a lo largo del día, semana, mes y de alguna manera era vergonzoso que, en un país donde promovemos el trabajo, los trabajadores paguen impuesto a las ganancias. Y hemos decidido enviar al Congreso Nacional una ley que elimina la cuarta categoría de impuesto a las ganancias para todos los trabajadores y jubilados de la Argentina”, anunció el Ministro de Economía.
En otro tramo, aseguró: “Mi presidencia va a estar marcada por la recuperación del salario y el ingreso en la Argentina. Hemos tomado la decisión por decreto de impulsar, desde el 1º de octubre, un mínimo no imponible de 1.700.000 pesos. En la Argentina solo van a quedar 80.000 gerentes, directores de empresas, jubilados de privilegio o beneficiarios por ser directores de compañías de altos ingresos, pagando el impuesto a las ganancias. Los trabajadores, sus horas extras, sus viáticos, no pagan más impuesto a las ganancias”.
A continuación, hizo dos pedidos concretos: “A todos los trabajadores y trabajadoras argentinas, muchos de los cuales, a partir de esta medida van a tener una mejora de hasta el 21% en el ingreso de bolsillo. Por un lado, pedirles que cuidemos nuestra economía y que, si tienen que ahorrar compren un autito, algún bien producido en la Argentina, no me vayan a comprar dólares”.
“Y lo segundo que les quiero pedir, con un enorme respeto. En los próximos 45 días se juega el futuro de la Argentina, lo que se juega es si somos un país que defiende la educación pública, el trabajo, la industria nacional, su soberanía y su moneda, o si somos un país en el que los trabajadores pierden sus derechos, pierden la posibilidad de educar a sus hijos en la universidad pública de manera gratuita y perdemos el país de desarrollo industrial”, enumeró.
“Les quiero pedir de todo corazón, pensando en el país, en el futuro, en el trabajo y en aquellos que no tienen trabajo, pensando en la industria nacional, en la universidad pública, que hagamos todo el esfuerzo posible para construir el 22 de octubre el triunfo de los trabajadores, de la Argentina, del peronismo, el triunfo del futuro. Depende de ustedes. O volvemos al 2015 o caminamos hacia adelante. Estoy comprometido, me voy a romper el alma, no solo la voz, voy a dejar hasta la última gota de sangre y transpiración para darle a los trabajadores argentinos un país en el que valga la pena vivir. Gracias compañeros por estar en esta plaza que tantas alegrías y tantas veces ha marcado la historia argentina”, concluyó.
Luego de la reunión, en la que participó junto a Roberto Baradel, Edgardo Llano y Claudio Marín, y tras los anuncios en Plaza de Mayo, el secretario general de la CTA y diputado nacional Hugo Yasky expresó: “Es la primera vez que podemos dejar atrás eso que fue un gravamen absolutamente injusto, confiscatorio del salario. Ya no se trata de un nuevo remiendo. Se trata de una transformación profunda que va a convertir esto en un impuesto a los altos ingresos. El pequeño universo que lo va a pagar son CEOS de empresas, personal de dirección de las empresas, algunos jubilados con jubilaciones de privilegio, son muy pocos, no más de mil, y algunos cargos jerárquicos del Estado, sobre todo del estamento político. El resto, ya no va a pagar impuesto a las ganancias. Para demostrar que se habla con hechos y con decisiones que se sostienen en la realidad, no como aquellas promesas de la campaña de Macri sobre que iba a desaparecer Ganancias. Para demostrar que no es una especulación de decir ‘bueno, envío un proyecto de ley y vamos a ver si sale o no’. Hoy se acaba de anunciar la decisión de firmar un decreto para que, a partir de octubre, con una base de $1.770.000 se deje de pagar Ganancias. Y se va a presentar el proyecto en el Congreso”.
“Los trabajadores y las trabajadoras tenemos que movilizarnos para presionar en la calle para que ese proyecto de ley, más allá de lo que signifique el decreto, se apruebe, y esa va a ser la solución definitiva”, subrayó Yasky y añadió: “En la misma reunión Massa agregó dos cosas que son importantes. Una es compensar lo que se va a dejar de percibir con el impuesto en términos del fisco, a través del Impuesto País, que significa gravar el trabajo extranjero. Es decir, cuando uno grava los productos que se importan, está gravando el trabajo de los que viven y trabajan fuera del país. Y, por otro lado, avanzar hacia un sistema tributario más justo, que hoy Sergio Massa anunció la decisión de modificar el IVA, ese otro gran impuesto regresivo que tiene la Argentina. Así que creo que estamos avanzando a pie firme hacia un objetivo que es construir un país con justicia social. La justicia social no es solamente la paritaria libre. La justicia social es también la distribución de la riqueza a través de todas las formas, y una de las principales es su sistema tributario”.